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viernes, 24 de agosto de 2012

Rainwob cupcakes o madgalenas de colorines

Que calor! Si, es la frase tipica del mes de agosto pero no podemos dejar de decirla y aún mas cuando te metes en la cocina a preparar cualquier cosa rica que necesite hornearse.
Aún asi queria preparar algo especial para un cumpleaños y despues de muchas vueltas por la red en busca de ideas me decidi por unos rainwob cupcakes mas conocidos en casa como magdalenas de colorines.

La receta es muy fácil y el proceso parecia sencillo pero luego te das cuenta de que tiene su trabajo.

Utilicé los siguientes ingredientes:

      150 gramos de mantequilla a temperatura ambiente (con este calor eso se consigue rapido pero en invierno habrá que sacarla al menos una hora antes de la nevera)
      250 gramos de harina
      200 gramos de azúcar
      2 huevos
      Una cucharadita y media de levadura en polvo
      1 pizca de sal
      150 ml de leche desnatada (es la que tomo y por eso suelo usarla pero podeis usar entera o semi)
      1 frasquito de aroma de vainilla de dr. Oetker
      Colorante en gel. En mi caso de la marca "Americolor" de colores azul, verde, amarillo, naranja y rojo


Antes de empezar recordar que vais a necesitar un bol pequeñito por cada color que querais usar, en mi caso fueron 5 pero podeis usar mas o menos colores, eso es a vuestro gusto y es mejor tenerlos preparados antes de ponerse manos a la masa.
También es un buen momento para poner el horno a precalentar y de preparar el molde para los cupcakes asi lo tendreis todo preparado cuando la masa esté lista.

¿Ya teneis los bols y todos los ingredientes? 

!Pues es hora de empezar!

En primer lugar tamizamos la harina con la levadura y la reservamos.
En otro bol batimos la mantequilla con el azúcar hasta lograr que se integren y veamos que la mezcla cremosa se va aclarando.
Ahora añadimos los huevos uno a uno y batiendo bien hasta que se incorporen a la masa. Cogemos el bol con la harina, añadimos la mitad a la masa y mezclamos. Añadimos la otra mitad y volvemos a batir hasta que la masa esté bien mezclada.

Es el momento de usar los bols para los colores. Podeis medir la mezcla y dividirla en partes iguales (una por cada color elegido) o arriesgaros a hacerlo "a ojo".

Teñimos cada porción con un color. Necesitais muy poca cantidad de colorante, ir probando poco a poco hasta que logreis el color que os guste pero recordad que despues de hornearse puede no salir tan brillante como esperabais.

Una vez teñida la masa la vamos echando en el molde. Yo empecé por el color azul, luego verde, amarillo, naranja y para finalizar el rojo y al horno a 180º durante 15-20 minutos. Depende de vuestro horno.

Y este fue el resultado:


He intentado poner la foto mas grande pero se descuadra todo, lo siento!


Truco (que yo no usé porque lo desconocia pero que puede veniros muy bien): me han dicho que si echais una capa de color, la meteis al horno un par de minutos y haceis esto con cada capa estas no se moveran y quedarán los colores mas uniformes. Lo haré la proxima vez

Besos, Marga


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